Reflejos en el Louvre

   Buenos días, buenas tardes o buenas noches, depende de cunado lo leáis. Hoy he publicado una obra en la sección de Fotografías con mucha edición, bonita. El título de la obra es "Reflejos en el Louvre". Va sobre la visita que hicimos al Louvre este verano a Paris. Como hicimos el viaje a Paris creo habéroslo contado en algún articulo anterior. Espero que os guste. 

   "El segundo día de nuestra estancia en París lo dedicamos al Museo del Louvre. Desde temprano, la emoción nos llevó a recorrer las calles adoquinadas que separaban nuestro pequeño y coqueto apartamento del majestuoso museo. Aquel apartamento, con sus ventanas adornadas por cortinas de lino y una mesa para comer  junto a bonito sofá cama, parecía sacado de una postal. Era perfecto, cálido, y a la vez, una puerta abierta a los encantos de la ciudad. 

   Al llegar al Louvre, nos recibió su pirámide de cristal, brillando bajo el sol de la mañana, como si nos invitara a descubrir los tesoros que albergaba en su interior. Marta y Héctor, mis hijos, caminaban entre las salas con ojos curiosos, maravillados ante cuadros gigantescos y esculturas que parecían congeladas en el tiempo. Mi esposa, siempre atenta, admiraba las obras con calma, mientras yo intentaba seguir el ritmo de su mirada, intentando no perderme nada. 

   En una de las salas, mientras recorría las exposiciones de escultura, mis ojos se detuvieron en un detalle que parecía querer contarme algo más. Un busto, delicadamente tallado en mármol, se reflejaba frente a dos espejos que lo duplicaban en una sucesión infinita de reflejos. Me detuve, hipnotizado. Los espejos no solo replicaban la figura, sino que parecían añadirle profundidad, historia, y una sensación casi mágica de eternidad. La mezcla de luz, perspectiva y la solemnidad del arte me hicieron sacar el móvil casi sin pensarlo. Abrí aplicación de cámara, enfoqué y con un sólo click capturé ese instante que parecía contener un secreto.

   Esa noche, ya en la tranquilidad del apartamento, abrí la imagen en mi aplicación de edición favorita, PICSART. Me dejé llevar por la inspiración y transformé la fotografía en una pintura digital. Intensifiqué los colores suaves, resalté las texturas y añadí un toque artístico que parecía transportarnos al mismo corazón del Louvre. Cuando terminé, contemplé la imagen: era más que una edición; era un recuerdo encapsulado, un momento único que ahora llevaba mi huella. 

   El Louvre nos había dejado más que conocimiento; nos regaló momentos de conexión y descubrimiento. Y entre todos, aquel busto reflejado en dos espejos se convirtió en el símbolo de nuestra experiencia: una visión múltiple y eterna de un instante fugaz, como el arte mismo. Ahora, esa imagen no es solo un recuerdo de París, sino un reflejo de lo que significa encontrar belleza en lo inesperado. "

   Espero que os haya gustado.

   Bye, bye my friends,

                                     nandoLARA